Es importante destacar que los detectores de humo son un elemento fundamental para la detección temprana de incendios en hogares, edificios y otros espacios. Su instalación es esencial para la seguridad de las personas y las instalaciones.

Cada tipo de detector de humo tiene sus propias características y propiedades para la detección de humo y gases de combustión. Por ejemplo, los detectores de humo iónicos son más sensibles a las partículas de humo producidas por fuegos de combustión lenta, mientras que los detectores ópticos son más sensibles al humo visible producido por fuegos de combustión rápida.

Los detectores de humo por puente de resistencia son menos comunes y se utilizan principalmente en áreas donde hay altos niveles de humedad, como cocinas y baños, ya que son menos propensos a dar falsas alarmas por la presencia de vapor de agua en el aire.